jueves, 13 de mayo de 2010

Otro día como ningún otro...

Nada como una tarde de primavera, no sé si disfrutar el sol en un camastro en el jardín de mi casa o fingir que espero una cita con aquella mujer que tanto anhelo para engañar a mi mente y poder al fin ser feliz, o dar un vuelta por ahí como un transeunte sin memoria; oler las rosas, sentir el viento, dar pasos como si fuesen los últimos en ésta tierra, mirar el cielo, contemplar el crepúsculo y darme cuenta de que existo.


martes, 11 de mayo de 2010

Orquesta Esperanza Azteca

La Orquesta Esperanza Azteca, implementada por iniciativa de Fundación Azteca y Grupo Salinas, demuestra que la música traspasa cualquier frontera y provoca e inunda de sensaciones a todo aquel que logra presenciar un recital de ésta magnitud.
En el ensamble no existe diferencia alguna entre sexo, posición económica e ideales, pues está conformado por niños de escasos recursos que tomaron la iniciativa de convertirse en mejores personas dedicando su tiempo exclusivamente a la música, ya que algunos de ellos no tuvieron la oportunidad de asistir a la escuela o tener una vida similar a la de un niño promedio.
Veamos pues un breve video entusiasta, vivo, ameno y lleno de color en el que los chicos demuestran su capacidad interpretativa y lo que prepararon por un lapso muy corto de tiempo.

lunes, 10 de mayo de 2010

-El Poder de la Palabra-



Buscamos racionalmente darle forma a nuestras ideas a través de la palabra.


















Resulta incomprensible el hecho de que una palabra pueda modificar completamente el contexto de una idea o de alguna expresión. Una palabra tiene la capacidad de hacer reír, llorar, imperar, ordenar, suplicar, y un sin fin de acciones con las que se relacionan las personas diariamente; si alguno prestara profunda atención a las palabras que salen de nuestra boca, seguramente se lograría una vida pacífica, utópica y diplomática, de tal manera que nos evitaríamos grandes confrontaciones y hechos de violencia.

“Somos esclavos de nuestras palabras y dueños de nuestro silencio”
Mahatma Gandhi

Cuidemos, pues, nuestra palabra en todo momento, procuremos que jamás perjudique ni cause dolor a los demás sino que, por el contrario, sea siempre expresión de nuestra bondad y de nuestros fraternales pensamientos y sentimientos de bien.